La Verdad sobre lo que pasó (carta simulada de Garaikoetxea a Asier Gomez)

Amigo Asier,

Hoy he leido la noticia en El Diario Vasco. Hemos quedado muy bien, como siempre. La verdad es que no supe verlo, no lo comprendí, pero eso que nos comentastes de lo de la web de Patxi López, entre canapé y canapé, era algo a tener en cuenta. Hemos dado la campanada una vez más.

Ayer mismo escribí esa nota y la envié al Noticias, que no nos sacan nada porque son del PNV, diciendo que uno de mis chiquitines había destapado lo de las Islas Caimán. Comprenderás que desde que despedimos a la Loli, ya no hay nadie que me escriba las notas, salvo los traidores que están a sueldo de Galdós.

Soy un caballero y te reitero mis disculpas. Sin embargo, tú tampoco le diste tanta importancia hasta que el PNV lo sacó a relucir. Nos han ganado por goleada.

Hoy hemos rezado por Eusko Alkartasuna Larreina y yo. No le vemos futuro, este país no nos comprende, nos ha dado la espalda como a nuestro héroe nacional, el cura Santa Cruz, ese demócrata de primera línea que se enfrentó al autonomismo de don Carlos y sus secuaces, igual que combatió a los malvados liberales centralistas anti abertzales.

Nos queda la convicción de que aunque la prensa nos ningunee, aún marcamos el paso al PNV y a los engreidos de Aralar, que no tienen ni tantos concejales ni alcaldes como nosotros y aún se creen un partido.

Tenemos espacio Asier, así que te pido que no te desanimes. Ahora entiendo por qué andas "chateando" -palabra que me recordaba al "chatín" de ese gran actor que es Arturo Fernández-, no era para echar una cana al aire como decían los desagradecidos Millán e Iturzaeta, otros que me han abandonado. Por cierto, Iturzaeta ni siquiera me invitó a su boda.

La inaguración de Donostia fue todo un gozo para Koldo y Yo, había unas chiquitas de 80 añitos, con sus falditas plisadas y su look " a la permanén" que nos quitaban el sentido. Habrás visto la fotuca en la que Koldo y Yo nos repartíamos a las pittikis: "las rubias pa tí, Koldo" -le decía- "y las morenazas pa mí" -sentenciaba seguidamente-, aunque la verdad es que todas estas niñas se habían teñido el pelo de blanco. Debe ser la última moda entre las nenas socialdemócratas.

En fin, ¡qué te voy a contar amigo Asier! No se volverá a repetir. En vez de dedicarme el día a coquetear con las pittikis de los alkartetxes, me dedicaré más a darle un toque de atención a Begoña Lasagabaster, que me ha dejado en mal lugar pasandose a PSOE, después de todo lo que he hecho por ella. Tampoco me pasaré el día atacando al PNV y a Aralar, ni le haré la ola a Otegi y su troup. No machacaré a los gipuzkoanos de Galdos, ni volveré a estrechar la mano de un picolo en la Casa de Juntas de Gernika, como ya hice en 1981, antes de mi conversión al independentismo de izquierrrrrrdas.

Pa ti las rubias, pa mi las morenas

Voy terminando, amigo Asier. Te reitero que sigas combatiendo a nuestros enemigos, los abertzales engreidos del PNV y los quitaespacios de Aralar, mientras yo me dedico a ver los toros desde la barrera. No les temo ni a Lopez ni a Basagoiti, puesto que el día que los vascos nos voten, otro gallo nos cantaría. Mira el éxito de Nafarroa Bai, ni la Uxue ni el Zabaleta, los navarros apoyaron a Na Bai porque me quieren y saben que yo siempre he apostado por los retos. En cuanto me fui de Zarautz, casi perdemos la alcaldía por culpa de la Etxaniz esa (donde esté un plazagizon como yo, sobran todas éstas), y en cambio en cuanto me ocupé de Navarra, ahí está NaBai.

No me preocupa Gipuzkoa, con Larrazabal, ese hombre tan dialogante y sereno, apenas se notará que nos hemos quitado de encima a Galdos, Gonzalez, Etxaniz, Beramendi, Tirapi...digo Elizalde, Oliveri, Rekondo y todos esos traidores.

Me despido de ti, y no creas, que desde que Aralar se ha sumado a nuestra coalición con ERC (¡cómo les hemos engañado, ofreciéndoles el tercer puesto para que picaran el anzuelo, mientras nosotros iremos en el número quinto!), el polo soberanista del que te hablé el otro día, ya no lo para ni Garzón.

¡¡¡Gora ni ta ni tarrak!!!, digo guitarrak, ups....¡¡¡gutarrak!!!

Un abrazo,

LENDACARI Don Carlos Garaikoetxea